La caverna y "Podemos".·

La reacción de la caverna política y mediática al éxito electoral de “Podemos” demuestra la preeminencia de las tripas sobre el seso a la hora de adoptar posicionamientos políticos. Queda el consuelo de saber que esa reacción troglodita de muchos peperos y señores de derechas, que procede directamente del bajo vientre, ha encontrado su salida por vía oral cuando podría haber buscado una escapatoria más cercana. En todo caso, el tufo a miedo y sectarismo que está dejando parece sospechar que algún escape por esa parte del cuerpo más lógica hablando de tripas sí se ha producido.

Una salida nada inteligente que da la razón al Sr. Iglesias cuando se refiere golosamente a la clase política tradicional como casta. Con estos enemigos puede darse con un canto en los dientes porque sin abrir la boca y con poco esfuerzo está consiguiendo que le hagan una estupenda campaña mediática, confirmando lo que el nuevo líder defiende: que todo intruso en un colectivo consolidado es muy mal recibido. Es decir, que todas las castas lo son y se mantienen en el tiempo porque repudian a todos los que no son como ellos o no responden a sus parámetros.

Pero además de abonarle el terreno a “Podemos”, se están echando arena a los ojos al confundir al enemigo.Salvo algún puntual votante de derechas despistado, el mayor yacimiento de votos de esta nueva formación no procede del PP sino que es fruto de los desencantados del PSOE que comulgan con el eslogan tan manido del PPSOE o directamente acusan al aparato del PSOE de complicidad en habernos traído, por esa mezcla de incompetencia e indefinición progresista, hasta la actual situación. Este análisis no puede tener ningún detractor porque incluso el nombre y apellido del nuevo líder nos aclara sin sutilezas la procedencia ideológica de sus mentores. La terrible pérdida de votos del PSOE ha encontrado su destino en un alto porcentaje en “Podemos”. Por tanto, estos voceros de bajo vientre lo que consiguen con sus exabruptos es exactamente lo contrario de lo que pretende su sesera: criticar a esos votantes que han abandonado a la única alternativa posible de gobierno frente a la derecha. A la par que creen debilitar a “Podemos” están reforzando al PSOE y consiguiendo que algún desencantado se haya arrepentido de entregar su voto a una fuerza de tan extremada izquierda, pro-castrista y amante de los éxitos chavistas.

Incluso el Sr. Arriola, el asesor-ideólogo pepero en la sombra, cayó en el tremendo error de calificar de frikis a todos los representantes y votantes de “Podemos”. Es verdad que luego le dio un síncope, quizá al valorar fríamente y ya con la cabeza el flaco favor que le estaba haciendo al partido que le paga la nómina (en a y en b, según dicen las malas lenguas) y los argumentos que le ha puesto a huevo a “Podemos” para que se reafirme en lo de la casta política.

Pronto dejarán de hablar del Sr. Iglesias. De la misma manera que ahora han salido en tromba ante su éxito electoral, pasarán luego a ningunearlo cuando algún listo del partido les diga que el enemigo a batir es el PSOE y que la existencia de “Podemos” es para ellos una bendición porque al que le resta votos es al PSOE. Quizá ese listo sea el Sr. Arriola, ya recuperado de su desvanecimiento político.