lunes, 2 de septiembre de 2013

Habas con alfalfa

Aunque personalmente siempre he tenido dudas sobre el coeficiente intelectual general de los votantes incondicionales del PP, los dirigentes de este partido no tienen absolutamente ninguna: sin manifestarlo públicamente opinan que son tontos de remate. Y no les falta razón a la vista de los comentarios que hacen sus acérrimos para justificar toda la porquería que salpica la actualidad política, sobre todo el caso Bárcenas – que cada día deviene más en el asunto Rajoy -. Cuando se leen, con grandes dosis de paciencia, las opiniones que este tipo de personas escriben en la prensa digital comentando las últimas declaraciones de Floriano sobre la imposibilidad de sacar datos de un ordenador porque no tiene puerto USB, o de Pujalte preguntándose de dónde habrá sacado Bárcenas tanto dinero, o de Rafael Hernando equiparando un régimen democrático como la República con los 40 años de golpismo y dictadura del franquismo,… cuando se leen los apoyos y adhesiones a declaraciones de tamaña ridiculez intelectual, no se puede sino concluir que los dirigentes del PP saben perfectamente que una gran parte de su electorado presenta deficiencias mentales graves.
El siempre animoso Pujalte ha querido circunscribir este calificativo a un pequeño círculo de jóvenes que se muestran ufanos ante las cámaras exhibiendo sus preferencias fascistoides, con un simple “tontos hay en todas las partes”. Esta evidencia se podría aderezar, por similitud con la cocina tradicional, añadiendo que “en todos los lados se cuecen habas, y en algunos a calderadas”. Hace mucho tiempo que defiendo que, junto a los que tienen argumentos justificados para ser el PP – ricos, terratenientes, empresarios, políticos profesionales,… -, se añaden unas millonadas de tontos que resultando ser carne de cañón para las políticas de derechas, votan ignorantemente sí o sí al PP hagan lo que hagan y sin reparar en las consecuencias de su voto. Obreros que son despedidos por una reforma laboral leonina, médicos y profesores expulsados de su carrera por la privatización o supresión de servicios públicos, gentes de a pie que sufren los recortes sanitarios porque no tienen posibles para acceder a la sanidad privada,… Funcionarios, estudiantes, jubilados, empleados de banca,… sufren directamente las consecuencias de políticas neoliberales basadas en el sálvese quien pueda o en el que no pueda que arree. Por tanto, me sumo a la evidencia de Pujalte en el sentido de que en todos los sitios hay tontos, pero en el PP están a calderadas.      
Y éste es el gran problema de este país: que al dar la democracia el mismo valor al voto de un tonto que al de una persona normal, tenemos un gobierno de Mariano apoyado por una mayoría absoluta tranquilamente asentado en el poder porque saben perfectamente que sus recortes, mentiras, manipulaciones y desfalcos son avalados por millones de tontos.
Este país, por mucho que nos empeñemos, no es homologable a las democracias europeas de nuestro entorno. En países serios y responsables hace mucho que el Gobierno habría tenido que tomar medidas radicales si sus ciudadanos conocieran la mitad de la mitad de lo que sabemos sobre el asunto Rajoy. Aquí, según los últimos sondeos, todavía el PP ganaría si mañana se convocasen elecciones generales. Y con este apoyo, con la seguridad que otorga el apoyo incondicional de millones de tontos, Mariano se atreve a decir lo que va a hacer en los próximos meses, con bajada general de impuestos en el año electoral. ¿ Quién da más alfalfa a tanto asnerío?.

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